Vuelve a sus orígenes
"La tranquilidad con la que se vive en Tamichopa es lo que Manuel Lugo Barbachán ama de su tierra. No cambiaría por nada esa vista que tiene del patio trasero de su hogar: Una cabaña de madera que él mismo hizo y unos enormes álamos cuyo sonido de las hojas meciéndose al viento se une al del agua que va corriendo de un canal de riego. Luego de vivir durante 22 años en Estados Unidos se dio cuenta que no se puede estar lejos del lugar que uno quiere y tampoco lejos de los que se quiere. Como descendiente de los kikapú, aunque nacido en Sonora, Lugo Barbachán bien podría vivir en Estados Unidos, pero definitivamente no era lo suyo. “Es una vida muy, muy exigente”, relata, “yo estoy a gusto aquí, mira... todo bonito... todo”.
."Para algunos los kikapú son la etnia más “favorecida”, al ser descendientes de norteamericanos, sin embargo actualmente enfrentan diversos retos que amenazan su permanencia como grupo étnico. La necesidad de ingresos económicos constantes y la falta de apoyos a proyectos productivos o que les ayuden a preservar su patrimonio cultural, son algunos de los problemas que enfrenta esta etnia que sobrevive gracias a la fortaleza de su gente. La pérdida de sus rasgos culturales y sobre todo de su lengua es algo que pesa a los integrantes de la etnia, pero es poco lo que pueden hacer para rescatarla. La gobernadora de la etnia, Manuela Barbachán, define a los kikapú como una raza fuerte y luchadora, no en vano continúan en su territorio, a pesar de la falta de oportunidades. La situación de la etnia la resume en una frase: “Pues aquí estamos, aguantando”.
Kikapú
Los actuales asentamientos kikapú son el resultado de un arduo peregrinaje desde la región de los grandes lagos de Michigan y de Eire, en Norteamérica, hasta el norte de México. Actualmente, los kikapú viven en reservaciones en Kansas y Oklahoma, Estados Unidos, y en las comunidades de El Nacimiento, Coahuila y en Tamichopa, municipio de Bacerac, en la zona serrana de Sonora. Durante la década de 1980, algunos habitantes de Tamichopa llevaron a cabo una campaña entre los kikapú desperdigados, para una refundación del pueblo. La comunidad actual es de alrededor de 80 personas. La lengua kikapú forma parte de la familia lingüística norteamericana algonkiniana. El grupo de Sonora no practica su lengua ancestral, ya que ésta fue destituida por el castellano; su último hablante murió en 1996. Poseen dos tipos de vivienda: casas indias y casas mexicanas. La vivienda india tiene dos variantes, casa de invierno: elíptica, con una estructura de troncos delgados cubiertos de tule, con el fuego sagrado en el centro. Aquí es donde se ofrecen los sacrificios a su divinidad (Kitzihaiata) y se reciben a los nuevos miembros de la tribu. Y casa de verano: rectangular, con paredes de carrizo y techo elíptico de tule. En el interior se encuentran varias camas sostenidas por troncos, y al centro el fuego sagrado. La vivienda mexicana es de concreto y lozas, con los servicios eléctricos e hidráulicos de la vida moderna. Actualmente su artesanía consiste en la fabricación de tehuas o mocasines con piel de venado curtida y que es bordada con chaquira. Dentro de su religión ser buen kikapú significa cumplir siempre con los ritos de cacería, purificación, año nuevo, fuegos sagrados y bautizos por medio de oraciones, sacrificios y ayunos. Las celebraciones van siempre acompañadas de carne de venado. El fuego constantemente encendido en el centro de la casa recuerda la oración constante a Kitzihaiata, quien escogió a los kikapúes para poblar la tierra. El grupo kikapú en Sonora, se encuentra en un inminente peligro de pérdida de su identidad como grupo indígena. Las celebraciones y ritos tradicionales se han perdido, han asumido la religión católica y celebran alguna fiesta de sus Santos, o participan en las fiestas que se celebran en los municipios cercanos.
Kikapúes, “Los que andan por la tierra”.
Los actuales asentamientos kikapú o kickapoo son el resultado de un arduo peregrinaje desde la región de los grandes lagos de Michigan y de Eire, en Norteamérica, hasta el norte de México, adonde llegan a mediados del siglo XIX, solicitando permiso al gobierno mexicano y asentándose en Coahuila. Originalmente, los kikapú habitaban, junto con otros pueblos indígenas, en los bosques que rodean la Región de los Grandes Lagos, entre Canadá y los Estados Unidos. Durante el invierno se dedicaban a la caza de venados y osos y durante el veranoemigraban a lugares más propicios para la recolección de frutos silvestres, la pesca y elcultivo de maíz y frijol. Su nombre "kikapu" o "kickapoo" (que en lengua algonquina significa "los que andan por la tierra", si bien algunos autores lo traducen como "el que se mueve por aquí o por allá") define precisamente esta actividad seminómada que también se reflejaba en su doble tipo de vivienda según fuera invierno (de tipo oval ) o verano (rectangular con una pequeña ramada en su entrada). En el centro de la vivienda siempre debe arder el fuego sagrado , como presencia viva del gran Espíritu, su dios Kitzihaiata. Leer más
ATRAPASUEÑOS KIKAPU
A principios del siglo XX un grupo kikapú, procedente de Oklahoma, se asienta en la Sierra Alta de Sonora. Desde entonces sus descendientes habitan en la comunidad de Tamichopa (“viento en la loma”), municipio de Bacerac, a ocho kilómetros del pueblo de Huachinera. Debido a la distancia de su lugar de origen y a las necesidades de adaptación, el pueblo kikapú establecido en Sonora fue perdiendo paulatinamente sus tradiciones originales, su lengua y sus artesanías. Desde marzo de 2008 Lutisuc Asociación Cultural I.A.P. estableció contacto con ellos iniciando un proyecto que considera la recuperación de sus tradiciones artesanales. El atrapasueños es una artesanía muy popular, se realiza con tiras de madera en forma circular de muy diversos tamaños, en su interior se cruzan varios hilos simulando una tela de araña en la que se inserta un pequeño cuarzo o piedra semipreciosa. En la parte inferior cuelgan plumas generalmente de águila, gavilán o quelele. La función de esta artesanía, de acuerdo a la tradición Kikapú, es atrapar los sueños mediante el tejido de una red, parecida a una telaraña. Las pesadillas, se quemarán con el primer rayo de la luz del día. Los buenos sueños pasarán por la red y llegarán a la mente. Aquellos huidizos, que se deslizan por las plumas, son los que no logramos recordar.
Lucha y resistenciaLos kikapúes se llaman a sí mismos Kikaapoa, que significa "los que andan por la tierra". Algunos autores lo derivan de ki wika pa wa: "el que está alrededor" o "el que se mueve, aquí o allá"..
Los kikapúes defendieron tenazmente la frontera mexicana, por lo cual el gobierno de Estados Unidos les ofreció trasladarlos a una reserva norteamericana, ofrecimiento que ellos rechazaron. En 1873 unos 500 soldados norteamericanos, al mando del coronel Mackenzie, atacaron un pueblo kikapú mientras los hombres se encontraban de cacería. Asesinaron a 16 personas y capturaron a otras 39, entre los que se contaban mujeres, niños y ancianos, quienes fueron trasladados a Estados Unidos. Los kikapúes formaron un consejo de guerra para perseguir a los invasores en el desierto de Chihuahua. El gobierno mexicano interpuso reclamaciones diplomáticas y ofreció el regreso voluntario de los kikapúes a Estados Unidos si les regresaban a sus mujeres e hijos. En 1873, 500 kikapúes se dirigieron a la reservación de Kansas; de éstos, cerca de 90 decidieron quedarse en México. Este grupo fue trasladado a Saltillo, de ahí se dirigieron a Durango y, en 1874, 22 familias regresaron a repoblar El Nacimiento y a seguir defendiendo la frontera.